miércoles, 15 de febrero de 2017

¡BIENVENIDOS!



¡Bienvenidos a todos a mi diario-blog de Educación Plástica!



El objetivo de este diario-blog es colgar en una serie de actividades o tareas que realice en la clase de de educación plástica.
Así pues, a modo de introducción, en esta primera entrada del blog me gustaría explicar mi experiencia con la Educación Plástica en lo que se refiere tanto a la educación reglada como a la informal. 
Mi objetivo con esto, es que se hagan una idea de lo que he vivido en lo que respecta a este ámbito, es decir, que tengan una imagen previa de lo que he hecho anteriormente y de las sensaciones que he experimentado para que a modo de diario en este blog, contarles las experiencias que tendré este año en esta asignatura como las actividades que realizaremos.




Pues... ¡Comenzemos con mi autobiografía!


A lo largo de mi trayectoria académica, he recibido clases de educación plástica durante la etapa de primaria y de secundaria. Como nos encontramos con dos etapas diferentes, las explicaré por separado, centrándome en primer lugar en la de la educación primaria.


En cuanto a esta etapa, puedo decir que experimenté muy buenas sensaciones con la educación plástica. Esto es así gracias a que tenía una profesora que amaba la asignatura y también porque es una asignatura que me llama, una asignatura en la que disfruto trabajando y en la que siempre sacaba muy buenas notas. Con esto no quiero decir que se me de bien dibujar, pero es una materia que te permite ser creativo, característica que con,sidero que capta la atención, el entusiasmo y las ganas de aprender de cualquier niño. Sin embargo, es curioso que me guste dibujar, pintar, hacer manualidades y demás pero que el arte no me guste, a no ser que sea un cuadro muy colorido, un cuadro llamativo que capte mi total atención.

En la etapa secundaria pasó algo similar, me sentía bien dibujando, y disfrutaba haciéndolo. Sin embargo, en este caso los dibujos que nos mandaban a hacer, entre otras actividades, eran más serias que las que nos encargaban en la primaria. 

Así pues, aunque los trabajos suponían una mayor disciplina, seriedad y trabajo constante, no me cansaba, me gustaba realizarlos, pero, esta vez, nos tocó una profesora que no fomentaba mucho la creatividad, ni la libertad. Sus clases se basaban en hacer lo que ella decía, tal cual. Sin embargo, nunca perdí el entusiasmo por la asignatura, y aunque instruidos de una manera casi autoritaria por la profesora, trabajábamos como si saliese de nosotros mismos lo que estábamos haciendo.

A continuación, voy a tratar aspectos que conciernen a las dos etapas, por lo que a partir de ahora trataré las dos en conjunto. Atendiendo a esto, he de decir que sobre todo lo mencionado anteriormente (profesora, concepciones mías sobre la asignatura...) influyen las diferentes culturas educativas con las que he mantenido contacto como son la familia, el entorno,  los diferentes tipos de escuelas, la ciudad,  la universidad, etc.


En cuanto a la familia he de decir que siempre han apoyado mi creatividad e incluso la han fomentado, por ejemplo, apuntándome a distintas actividades extra escolares. Por otro lado, considero que el entorno está muy presente, pues no es lo mismo vivir en el centro de la ciudad, que en un pueblo costero (que aunque posee de todo). Digo esto, porque yo vivo en uno (Playa Honda, Lanzarote) y cada vez que nos dejaban dibujo libre siempre dibujaba la playa con una hermosa y cálida puesta de sol, por lo que vivir en un lugar o en otro va a condicionar tus preferencias y tus gustos, así como tu creatividad. Siempre dibujaba esto porque para mí, no hay nada que transmita más paz y tranquilidad que el sonido del mar y el calor del sol.


Atendiendo a esto, pienso que el tipo de escuela también influye a la hora de impartir esta asignatura y a la hora de ser percibida por los alumnos. tanto al colegio como al instituto que iba, tenían la playa en frente y muchas veces, en el colegio (que nos dejaban más libertad a la hora de expresarnos), nos llevaban a la playa a dibujar el litoral o algo que nos llamase la atención. Esto nos encantaba a los alumnos, y yo disfrutaba muchísimo, porque la playa es lugar esencial para mí, pues ha estado ahí a lo largo de mi desarrollo. Es un lugar en el que he disfrutado muchísimo.

Ahora, en la universidad, donde vuelvo a tener esta materia varios años después, me vuelve el entusiasmo y las ganas por la asignatura, así que, mediante este blog... ¡¡espero transmitirles tanto las emociones que experimento como los trabajos realizados!!

A continuación, y teniendo en cuenta mi experiencia durante esta etapa, voy a atreverme a decir lo que es para mí un buen profesor. Un buen profesor es aquel que se preocupa por el aprendizaje de sus alumnos, es aquel profesional que tiene un buen trato con ellos y que es capaz de ayudarlos en lo que haga falta con la finalidad de que todos y cada uno de sus alumnos, alcancen su máximo éxito. Atendiendo a esto, un buen profesor de plástica desde mi punto de vista, debe tener en cuenta las preferencias de los niños y sacar de ellas el aprendizaje que deben adquirir, para que siempre trabajen desde la motivación.

Además considero que un buen alumno, es aquel que muestra interés por la asignatura y que disfruta trabajándola. Sin embargo, este factor, depende desde mi punto de vista del profesor ya que en muchas ocasiones todos hemos tenido esa asignatura que nos gusta, pero de la que no aprendemos nada, debido a que el profesor no llega a transmitirnos nada, ya sea por las explicaciones o por sus actitud frente a la materia y hacia la docencia.

Finalmente, una buena enseñanza se resume en una mezcla entre ser un buen profesor y ser un buen alumno, pues si ambos se complementan bien, el aprendizaje es mucho más ameno y dinámico. Sin embargo, también influyen otros factores como el uso de nuevas tecnologías, métodos, trabajo en equipo y demás, que como he mencionado anteriormente, depende del profesor utilizarlos o no.


De todas estas experiencias saco en claro los motivos por los cuales me gustaba la asignatura, que ya los he mencionado anteriormente. Como ya he explicado, mi gusto por la educación plástica, se debe al entorno en el que me encontraba cuando recibía clases de esta materia, así como del apoyo familiar, entre otros factores culturales. Así pues, en los talleres que realizaba había compañerismo entre compañeros, aunque en ocasiones competitividad por ver qué dibujo era el más bonito, y, el trato con los profesores era bueno.



Para finalizar la entrada y despedirme de todos ustedes considero que es necesario destacar otros aspectos que hay que reflejar en cuanto a la enseñanza de la educación plástica. 


En primer lugar, considero que es relevante mencionar que he vivido muy buenos momentos en lo que respecta a esta asignatura. La organización escolar era muy buena, las aulas eran bastante amplias, por lo que podíamos movernos por ellas de manera libre y trabajar en grupos, además, en el aula de plástica, se encontraban las mesas organizadas en forma de ''U'', por lo que todos nos veíamos las caras. 

Por otro lado, he de decir que la escuela tenía muy buena relación con la comunidad, pues hacíamos muchas salidas en las que no solo disfrutábamos de la excursión, sino que también aprendíamos, por lo que considero que había una buena comunicación entre el centro y la comunidad.


Hasta aquí mi autobiografía. ¡¡Espero que les haya gustado!!



¿Ya te marchas?, espera un segundo, ¡¡que esto no ha acabado!!

Una vez planteada mi autobiografía, me gustaría dar una serie de datos sobre la profesora que me gustaría ser. 
Para mí, un buen profesor como he mencionado anteriormente, debe ser capaz de detectar las posibles necesidades que presentan sus alumnos, para así darles una respuesta adecuada. Para mí, un buen profesor debe tener en cuenta los gustos de sus alumnos para conseguir aprendizajes en ellos a través de sus preferencias, creando de esta manera, un aprendizaje significativo. Para mí, un buen profesor es aquel que vela por una educación de calidad para sus alumnos. Para mí, un buen profesor es aquel que introduce nuevas tecnologías en el aula para trabajar de una manera más didáctica y amena, es decir, familiarizar no solo al alumno con la asignatura sino con las tecnologías que le rodean para que haga un uso eficiente de ellas. Finalmente, para mí, un buen profesor es aquel que lucha por conseguir el máximo éxito de sus alumnos, aquel que estudia las barreras que suponen el impedimento para que un alumno aprenda, aquel que pone todo de su parte para superarlas.

Atendiendo a esto, yo utilizaría todo lo que estuviese en mi mano para lograr ser la profesora que he descrito anteriormente. Partiendo siempre desde la base de la motivación, de un entorno que aunque no sea el ideal se hagan cosas maravillosas, o por el contrario, un entorno que favorezca el aprendizaje. 

Finalmente, considero que aunque el entorno influye mucho en el aprendizaje de un alumno, el objetivo de lograr aprendizajes, está en manos del profesor y de la actitud que tenga ante las adversidades.


¡¡FIN DE LA ENTRADA!!, si se han quedado con ganas de más nos vemos muy pronto. 

Espero que les haya sido útil, si quieren seguir viendo como va avanzando el blog, 

¡¡estén atentos a él!!





             ¡¡HASTA LA PRÓXIMA!!


TodoMinion. (2015). Minion. [Ilustración]. Recuperado de: 

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